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La concejala de Obras, Teresa Sánchez, ha realizado un seguimiento de esta actuación clave para evitar inundaciones, que incluye un colector de 1,20 metros de diámetro y se extiende hasta el Arroyo de la Villa.

Las obras de canalización de aguas pluviales en calle Ollerías avanzan a buen ritmo y ya han alcanzado su tramo más elevado, en la intersección con calle San Sebastián. Esta intervención forma parte del ambicioso proyecto municipal que se extiende hasta calle Cruz de San Roque, y que busca dar solución definitiva a los problemas de escorrentías e inundaciones en esta parte del casco histórico. La concejala de Obras del Ayuntamiento, Teresa Sánchez, ha realizado esta semana un seguimiento junto a los técnicos municipales de los trabajos que se están realizando.

Esta infraestructura forma parte del Plan Municipal de Mejora Hidráulica, diseñado para adaptar la red urbana a los efectos del cambio climático y las lluvias torrenciales cada vez más frecuentes. El diseño de esta red de evacuación incorpora criterios de sostenibilidad, durabilidad y capacidad de respuesta ante episodios extremos, con una inversión que también contempla la renovación del pavimento, arquetas y servicios afectados.

Situación actual

Durante estos días, los trabajos se centran en el picado del pavimento y la apertura de las instalaciones subterráneas, donde se está construyendo un aliviadero fundamental para la red hidráulica de la localidad. La concejala de Obras, Teresa Sánchez, ha explicado sobre el terreno que “estamos en lo que sería la pieza de bóveda de esta obra, que es el aliviadero que recogerá las aguas de lluvia tanto de todo el casco histórico en superficie como todo lo que baja por calle Piedras, con un tubo de 1,20 m. que es el que hay instalado para poder absorber todas esas aguas pluviales”.

Además, la altura del antiguo cine María Cristina, se ha construido el que ya es el primer aliviadero de la red interior del municipio, una infraestructura que permitirá derivar el agua de lluvia según su volumen, hacia la red existente de saneamiento o directamente a la nueva red de pluviales. Esta última, mediante un colector de 650 metros de longitud, conducirá el agua hasta el Arroyo de la Villa.

Javier Imbroda, coordinador municipal del Ciclo Integral del Agua, ha detallado que “el sistema está diseñado para garantizar que, ante lluvias intensas, las aguas pluviales se canalicen correctamente y no discurran en superficie, eliminando así los riesgos de inundaciones en la zona”.

 Corte del tráfico

Mientras continúan las labores, el tráfico permanecerá cortado en toda la calle Ollerías y hasta la intersección con calle Cruz de San Roque, por lo que se recomienda a vecinos y conductores utilizar rutas alternativas.