El Ayuntamiento culmina una de las obras más importantes de los últimos 15 años con la renovación integral de saneamiento, abastecimiento y superficie, mejorando la seguridad hidráulica y la imagen urbana del municipio
La calle Ollerías vivió ayer su inauguración oficial tras más de dos años de trabajo entre proyecto y ejecución, que han supuesto una inversión superior a 1,3 millones de euros. Se trata de una de las actuaciones más relevantes acometidas en el municipio en los últimos 15 años, tanto por su cuantía económica como por la envergadura de las infraestructuras soterradas que garantizan la seguridad hidráulica en episodios de lluvias torrenciales.

Gracias a esta intervención integral, el vial que conecta San Sebastián con el recinto ferial se reabre completamente renovado, con mejoras en saneamiento, abastecimiento, telecomunicaciones y superficie urbana, poniendo fin a los problemas de inundaciones que afectaban al centro histórico.
Una obra clave para la seguridad y el futuro urbano
La actuación ha transformado no solo el aspecto exterior de la vía, sino sobre todo su subsuelo, donde se ha ejecutado un nuevo sistema de saneamiento diseñado para canalizar las aguas fluviales hacia el cauce público del Arroyo de la Villa.
- Se han pavimentado 3.225 m² de superficie vial, con 955 m² de acerado y 260 m² de aparcamientos.
- En total, se han urbanizado unos 700 metros lineales de vial, de los cuales 500 m corresponden a la zona urbanizada y 200 m al futuro vial junto al arroyo.
- Se ha instalado un colector de aguas pluviales de 1.200 mm de diámetro y 600 m lineales, así como un colector de fecales de 400 mm y 400 m lineales.
- La obra se completa con 900 m de nuevas conducciones de abastecimiento, mejoras en telecomunicaciones, baja tensión, gas natural, alumbrado público y redes de riego.
- En total, se han movido 13.500 m³ de tierra en un terreno complejo y arcilloso.


Agradecimientos y compromiso institucional
Durante el acto inaugural, la concejala de Obras Públicas, Teresa Sánchez, destacó que “lo más importante es lo que hay debajo”, subrayando la magnitud de las infraestructuras que ahora garantizan la seguridad de la zona. También agradeció el trabajo de la empresa constructora Torrumoti S.L.U. y pidió disculpas a los vecinos por las molestias causadas durante los meses de obra.
El ingeniero técnico industrial municipal, Javier Imbroda, resaltó la complejidad técnica de la intervención y los beneficios en la reducción de pérdidas en las redes. Por su parte, el arquitecto Francisco Javier Morales agradeció la implicación del personal técnico, la empresa constructora y la paciencia de los vecinos.
El alcalde, Anthony Bermúdez, se sumó a estos agradecimientos y destacó la importancia de esta actuación como “una de las obras más significativas de los últimos 15 años”, no solo por su inversión económica, sino por su trascendencia en la modernización de la ciudad:
“Lo que hay por debajo es mucho más importante de lo que se ve. Con esta inversión hemos garantizado la seguridad de nuestro centro histórico y dado un primer paso hacia nuevos proyectos de revitalización urbana”.




Un nuevo eje urbano para Alhaurín el Grande
La inauguración contó con la presencia de vecinos y vecinas que participaron activamente en el acto, mostrando su satisfacción tras meses de trabajos.
Con esta intervención, la calle Ollerías no solo recupera su tránsito y aspecto urbano, sino que se convierte en un eje clave para la seguridad hidráulica, la movilidad y la modernización de Alhaurín el Grande, marcando el inicio de futuros proyectos de transformación urbana como la revitalización del centro histórico y del barrio del Bajondillo.